1939, un brigadista Internacional, posiblemente Antonio Stoffella, realizaba en los últimos meses de la Guerra Civil un grafito con motivo de la noticia de la cercanía de las tropas nacionales y la evacuación del Castillo de Castelldefels.
En el mencionado dibujo, se representaba el saludo de un brigadista y la inscripción “Nous partons 22/1/39 Salud y suerte, mañana más”. Además, se podía observar al brigadista esperando la partida en una estación de tren y con la frontera de España y Francia a la vista. El grafito presagiaba lo que tenía que ser una inminente partida por la proximidad de las tropas nacionales. Más tarde con el final de la guerra ese “mañana más” de la inscripción nunca se produciría.
Esta imagen es una de las que representó el espíritu solidario de aquellas personas de todo el mundo, los y las brigadistas internacionales, que vinieron a nuestro país a defender la Segunda República, la democracia y la libertad.
Esta es una de las imágenes que se pueden observar en la Capilla de la Salud de la iglesia del Castillo de Castelldefels. Unos dibujos realizados en lo que fue la prisión de ese emplazamiento, en el que estuvieron acuarteladas unidades de las Brigadas Internacionales. Además del grafito mencionado, en dicho emplazamiento se pueden observar otros que no reflejaban imágenes de lo que estaba siendo una guerra cruel, sino más bien paisajes, retratos de camaradas, o simplemente un perro o un barco. Son una parte de nuestra historia que por gran suerte pudieron permanecer allá escondidas, tras una pared, durante el franquismo. Después con la democracia pudieron ser recuperadas y sacadas a la luz, por lo que merece la pena que no permanezcan en el anonimato y que vayamos a observarlas.
Miguel de la Rubia
En el mencionado dibujo, se representaba el saludo de un brigadista y la inscripción “Nous partons 22/1/39 Salud y suerte, mañana más”. Además, se podía observar al brigadista esperando la partida en una estación de tren y con la frontera de España y Francia a la vista. El grafito presagiaba lo que tenía que ser una inminente partida por la proximidad de las tropas nacionales. Más tarde con el final de la guerra ese “mañana más” de la inscripción nunca se produciría.
Esta imagen es una de las que representó el espíritu solidario de aquellas personas de todo el mundo, los y las brigadistas internacionales, que vinieron a nuestro país a defender la Segunda República, la democracia y la libertad.
Esta es una de las imágenes que se pueden observar en la Capilla de la Salud de la iglesia del Castillo de Castelldefels. Unos dibujos realizados en lo que fue la prisión de ese emplazamiento, en el que estuvieron acuarteladas unidades de las Brigadas Internacionales. Además del grafito mencionado, en dicho emplazamiento se pueden observar otros que no reflejaban imágenes de lo que estaba siendo una guerra cruel, sino más bien paisajes, retratos de camaradas, o simplemente un perro o un barco. Son una parte de nuestra historia que por gran suerte pudieron permanecer allá escondidas, tras una pared, durante el franquismo. Después con la democracia pudieron ser recuperadas y sacadas a la luz, por lo que merece la pena que no permanezcan en el anonimato y que vayamos a observarlas.
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