dijous, 16 de juny del 2011

Salvem l'Hospital de Viladecans

No podíamos asistir inertes a lo que parece ser el ocaso de nuestro Hospital de toda la vida. Nuestros mayores pelearon mucho por tenerlo. Nosotros estamos en lucha para preservarlo.
En los últimos años, a los ciudadanos de Begues, Castelldefels, Gavà, Viladecans y Sant Climent nos ha tocado actuar en  diversos episodios donde el  protagonista ha sido el Hospital de Viladecans. 
Desde la construcción de los edificios de consultas externas o urgencias hasta la reciente ampliación de tres quirófanos, pasando por la  prometida edificación del nuevo Hospital, cada paso adelante de Sant Llorenç nos ha costado mucho esfuerzo.  
Esto, sumado a las "movidas" en las que estuvieron involucrados nuestros padres y abuelos, cuando la Roca decidió cerrarlo, hace pensar que posiblemente este sea el Hospital más reivindicado en  la historia de Catalunya. Tanto empeño nos ha conferido la tradición de ser luchadores por la permanencia y el crecimiento de nuestro Hospital. 
Hace un mes, el fuerte arraigo de los vecinos, aliado a las detonantes  embestidas de la Consellería de Salut,  desataron el nacimiento de la "Plataforma en Defensa del Hospital de Viladecans y de la Sanidad Pública", desde donde se está liderando la movilización ciudadana. 
Esta Plataforma, coordinada por asociaciones vecinales y representantes de algunos de los ayuntamientos de las poblaciones afectadas sensibles al tema, aglutina también entidades ciudadanas adheridas y representantes de los trabajadores,  cuyo propósito  fundamental es lograr un  Hospital de Viladecans grande (donde disponer de la mayoría de prestaciones sanitarias especializadas), bueno (que ofrezca los mejores resultados en lo que se refiere a diagnóstico y tratamiento, acompañados de una calidad asistencial y trato intachables), y totalmente público (para impedir que el afán de beneficio económico no tire por tierra todo lo demás).
Así, teniendo en cuenta el difícil momento social que estamos viviendo,  condicionado por  las constantes amenazas de recortes en el presupuesto sanitario que ponen en jaque nada más, nada menos, que la calidad de vida en Catalunya, ciertos hechos atípicos que han venido sucediendo en nuestro hospital en los últimos meses nos han puesto en alerta.
En particular, la reciente supresión de la figura de director gerente del hospital más eficiente del Institut Català de la Salut y el control de su gestión por el equipo que viene dirigiendo el territori y el Hospital de Bellvitge desde hace ya varios años, quienes califican su decisión como una "territorialización" –pero que más parece enmascarar un "sometimiento con anexión"– nos trajo a la mente que, en los últimos años, hemos venido percibiendo muchísimas trabas al crecimiento del Hospital de Viladecans.  
Basta con ver que, el pasado año, poco antes de las elecciones autonómicas, la puesta en marcha de los tres nuevos quirófanos de uno de los hospitales con más listas de espera quirúrgicas de toda Catalunya se dilató casi dos años tras estar concluida la obra; además, ello condicionó el  cierre de dos de los quirófanos antiguos para reformas, los cuales siguen cerrados hasta ahora.  Es decir, de los siete quirófanos prometidos, hasta ahora solamente tenemos cinco. Esto, sin hablar de la tan sonada como etérea ampliación del Hospital de Viladecans, que ya lleva pendiente varios años.
Viendo lo visto  y sabiendo que el President Artur Mas viene planteando limitaciones a la existencia de hospitales localizados a menos de 30 km de otro hospital, sería de ingenuos no alarmarnos con todo lo que venimos asistiendo en el Hospital de Viladecans desde hace casi tres meses, y de temerarios no tomar las riendas y actuar para frenar el aparente intento de debilitarlo y paralizar su desarrollo.
Es por no fiarnos de las oficiales "buenas intenciones" de la Administración catalana con respecto al Hospital de Viladecans, que es el más pequeño, y, por lo tanto, más vulnerable, del Institut Català de la Salut, a partir de mediados de abril pasado, cada miércoles a las seis de la tarde nos venimos manifestando por las calles de Viladecans y Gavà, con el fin de dar a conocer el problema a la comunidad y de llamar la atención de las autoridades, de quien esperamos transparencia y verdadero compromiso con el crecimiento y la evolución de nuestro Hospital. 
 Carmen Rodríguez, Luis Jose Pueyo y Manuel Gómez