dimecres, 15 d’abril del 2015

Promesa de ampliación del hospital de Viladecans

 


Tenemos la promesa de una ampliación de nuestro hospital. Que nadie se engañe, solo tenemos eso. Una promesa.

A simple vista y sobre el papel se trata de una promesa generosa en cuanto a superficie y servicios pero a la que, según profesionales y expertos, le falta una unidad de UCI.

Este compromiso de la consejería viene acompañado, esta vez, por seis resoluciones parlamentarias favorables. Esto, por sí solo, debería darnos confianza y convertir en creíble el proyecto, pero tenemos antecedentes de promesas incumplidas y tenemos la experiencia, vivida a diario, de las enormes dificultades que los recortes en personal y en presupuesto están creando en el funcionamiento, razonable, del Hospital.

En este ambiente de escasez presupuestaria y recortes se hace más que evidente la pérdida de calidad asistencial y los frecuentes agobios, para profesionales y enfermos, en urgencias. Ante este orden de cosas, es fácil entender la incredulidad de la gente en el proyecto de ampliación.

¿Cómo dar credibilidad a dicha promesa, si seguimos manteniendo para el Hospital el mismo presupuesto del año pasado (36.000.000€, o sea, 200€ por habitante y año)? Si quedó corto en 2014, ¿alguien puede pensar que será suficiente para 2015?

Solo si la ciudadanía ve la recuperación del presupuesto y de los servicios arrasados por los recortes, verá como verosímil el compromiso de ampliación hecho por la consejería.

Desterremos cualquier duda. ¡¡¡Creemos firmemente en la democracia!!! En esa democracia participativa que mantiene a un pueblo activo y vigilante del cumplimiento y realización de los compromisos adquiridos por sus gobernantes.

Una sociedad democráticamente activa, convencida de sus derechos y comprometida con sus obligaciones, jamás deja de participar en la exigencia del cumplimiento de aquello que tanto en campaña electoral como desde el gobierno les prometieron los que, en su día, les pidieron y recibieron su voto.

Todos sabemos, o deberíamos saber, que la credibilidad en la democracia no es votar cada cuatro años y olvidarnos hasta el próximo cuatrienio. Cuando votamos no concedemos un cheque en blanco para que el elegido haga de su capa un sayo. No es así. Perdón… No debería ser así. No ignoro la obviedad de lo expuesto. Pero sí tengo mis dudas de que hayamos sido una sociedad beligerante y activa contra los incumplimientos, corrupciones, mentiras y cinismo de gran parte de nuestros políticos. No obstante, se hace necesario reconocer que nuestras autoridades locales, en el tema del Hospital, siempre estuvieron a nuestro lado.

Si queremos que el árbol de la ampliación siga creciendo y más pronto que tarde sea una realidad, no nos queda más remedio que seguir regándolo.

Se hace imprescindible que sigamos en la calle dando testimonio de nuestra exigencia, de nuestro inconformismo, dando apoyo a las acciones de la Plataforma en Defensa del Hospital (PDHV) y de la Sanidad Pública y de calidad.

Con el convencimiento de lo necesario de vuestra presencia, desde aquí, os animo a todos a la próxima CONCENTRACIÓN que tendrá lugar en la puerta del Hospital el día 5 de mayo de 2015 a las 19 horas. Gracias por vuestra asistencia.

Fernando Delgado